jueves, 28 de marzo de 2019

Nueve rondas: En memoria de Felicia #5

Es común subestimar a la literatura de horror en lo concerniente a lo social, sin detenernos a pensar que también sirve, como todo en la literatura, de un espejo. El cuento número cinco es una historia tan terrible y cotidiana en nuestro hemisferio que decidí plasmarlo por siempre en las Nueve rondas.

Nos lleva por un escabroso sendero hasta la cima de unos pecados tan atemporales como lo son el crimen y la venganza. Nos zambulle hasta los más vidriosos paradigmas para intuir el contexto de la historia con apenas algunos detalles en la narración.  

En memoria de Felicia es el cuento de nuestra caperucita regional, imposible de encasillar en un estrato determinado, porque es un problema que trasciende los niveles académicos y económicos de las víctimas. Es un estado de resignación que se traduce en la incapacidad colectiva de defenderse o de identificar a los sujetos como Mauro, no todos los agresores andan con machete en mano. De allí su nombre: En memoria de Felicia. Que está para recordarnos que un agresor va a ser siempre agresor.   

Escribí este cuento porque es algo de lo que nos advierten tanto en la adolescencia y en la juventud, que muchas veces cuando nos encontramos dentro de ese ciclo, ni siquiera nos damos cuenta, o al identificarlo, nos cuesta salir de él.

La historia está elaborada desde las dos perspectivas, la de Felicia que es la protagonista y que en su mutismo también cuenta su historia a través de pistas esparcidas, y de Mauro, quien expone con absoluta convicción la justificación de su acto, con apenas unas frases sueltas.

Es imposible no sentir un gusto como de cuento verídico al tratar de ver a través de los hilos de la trama y es porque quise contar una historia absolutamente veraz en los detalles, jugar con el canon de que las historias reales sobrepasan la perversión del horror concebido para divertir, como son los cuentos de terror. Quise convertir a los lectores de este cuento en testigos espectrales, que seguían cada palabra con ojos inquisitivos hasta el desenlace final. Juzgar quienes son los culpables e inocentes de esta historia dependerá de los lectores que seguirán animando la memoria de Felicia, cada vez que sus ojos se paseen por sus líneas.   

Nueve rondas se encuentra para la venta en la librería de Servilibro en la plaza Uruguaya de Asunción. También pueden ponerse en contacto con su página oficial en el facebook. #NueveRondas